Si, cinco días de rodriguez, encerrado en el pueblo sin más compañía que los animales y, de lejos, los cuatro vecinos. (a partir de ahora bautizo el grupo de vecinos como Los 4 fantásticos).
Al prepararme psicológicamente para esta situación, estos días pensaba… me voy a aburrir muchísimo… a lo que La Bruji respondía con una carcajada burlona. En lo que si coincidíamos es que a partir del segundo o tercer día nos íbamos a echar de menos un montón.
Bueno, pues aquí estoy, escribiendo a las 2 horas de haber salido la familia por la puerta, ya segué el campo de La Maruja y el Jesús, regué La Leira, fregué la cocina… y como nó… mientras fregaba pensaba… cuantas cosas tengo que hacer en estos días !!! y de esa sensación extraigo la siguiente reflexión.
Me doy cuenta de porqué se reía antes La Bruji… ahora me río yo también… jajajaja… No puedo ser más feliz que haciendo… lo que sea, seguro que estos días no voy a parar de hacer cosas porque eso es lo que me conecta con mi esencia y me hace estar en armonía conmigo mismo.